La voz de la experiencia: nuestros voluntarios y voluntarias

Nuestra Fundación cuenta con un total de 14 voluntarios y voluntarias que se entregan en cuerpo y alma para atender a las personas migradas. Entre todas y todos suman años de experiencia que avalan la calidad de la atención a los usuarios y usuarias. Toni Garcia Salvador i Maria José Gómez Garcia son solo dos ejemplos de estas personas que se dedican a la solidaridad y que hacen posible que los proyectos sin ánimo de lucro salgan adelante.

  • Cuál es vuestra función voluntaria a la Fundación?

Toni: Yo imparto clases de castellano a personas migradas. Mayoritariamente, son mujeres migradas que viven en Palma y que quieren aprender a leer, escribir, hablar y entender el castellano. Básicamente, enseñamos el lenguaje básico para socializar y hacer tareas administrativas y laborales.

Maria José: Por mi parte, soy la encargada de la ludoteca. Mientras las madres están en la clase de castellano, nosotros ofrecemos este servicio a sus niños y niñas de 0-3 años.

  • Qué objetivo tienen estas actividades?

Maria José: Nuestro objetivo es que disfruten y socialicen, puesto que no tenemos que olvidar que estos niños se encuentran en periodo de adaptación en un idioma y una cultura diferente al de su casa. El juego es una herramienta de placer y de aprendizaje. Ayudamos a socializar desde el respeto y la empatía. Además de esto, también procuramos que sus necesidades básicas estén cubiertas.

No somos una academia. Ellas se apuntan para aprender castellano, pero es un lugar de encuentro entre todas y de acogida donde se encuentran a gusto.

Toni Garcia Salvador, voluntario

Toni: En las clases es importante que aprendan, pero va más allá. No somos una academia. Ellas se apuntan para aprender castellano, pero es un lugar de encuentro entre todas y de acogida donde se encuentran a gusto.

  • Cómo se llevan a cabo estos proyectos?

Maria José: En la ludoteca contamos con todo tipo de juguetes, colchonetas de psicomotricidad, cuentos…todo les encanta! Además, gracias a las donaciones podemos adquirir todo aquello necesario por la atención de los niños y niñas.

Toni: A clase de castellano para las personas migradas impartimos el nivel A0 -oficialmente no existe este nivel, pero hemos diseñado un temario adaptado basado en varios estudios, dirigido a personas que no tienen conocimiento de castellano, ni inglés, ni francés-. También hacemos el nivel elemental.

Saben que somos voluntarios y nos dan las gracias mil veces. Es muy satisfactorio

Maria José Gómez, voluntaria

Cómo reaccionan a vuestro trabajo?

Maria José: Saben que somos voluntarios y nos dan las gracias mil veces. Es muy satisfactorio.

Toni: Es muy satisfactorio porque ellas vienen porque quieren, y yo también vengo porque quiero. Esto crea un ambiente muy empático.

  • Cuál es vuestra experiencia en el voluntariado?

Toni: Empezamos la actividad con los inmigrantes en la Fundación ambos juntos el 2012. Antes, yo había sido miembro del patronato. Personalmente, me identifico como sindicalista, a pesar de que profesionalmente me he dedicado a la hostelería.

Maria José: Yo soy maestra jubilada y cuando acabé mi carrera no quería estar en casa. Entonces, conocía la fundación gracias a Toni y me sumé. Me gusta hacer una atención individualizada a cada niño porque en mi vida profesional no lo podía aplicar tan específicamente.