Nosotros

La Fundació Serveis de Cultura per al Poble fue legalizada en noviembre de 1977 y se constituyó como Fundación privada de promoción con unos objetivos sociales concretos, tal y como se expone en los diferentes artículos de sus Estatutos que se han ido molulando a lo largo del tiempo:

Desde la vertiente cultural

Procurar la extensión de la cultura, en el sentido más amplio, a todas las personas o grupos que, por sus circunstancias sociales o personales tengan dificultad para poder acceder. En general, ofrecer los servicios e instrumentos culturales que pueda necesitar la sociedad mallorquina para el progreso cultural de su ciudadanía.

Desde la vertiente social

Las actividades, dirigidas a personas y colectivos vulnerables, siempre formarán parte de un proyecto y constituirán un acompañamiento para los colectivos afectados. Se trabajará en red con otras entidades que pertenezcan al tercer sector y otras plataformas de entidades públicas o privadas sin ánimo de lucro dentro del sector del trabajo social en la isla de Mallorca.

Magdalena Juan Marquès nació en Palma en el año 1932 y, a los 25 años, al morir su padre, heredó un gran patrimonio con el que creó la Fundació Serveis de Cultura per al Poble. La creación de esta Fundación fue un proyecto madurado durante unos años hasta que se consiguió su aprobación jurídica en el año 1977.

¿Quién era na Maena Juan Marquès? (así la llamaban familia, amigos y compañeros: Maena). Era una mujer con una vivencia y unas convicciones profundamente cristianas. Marcó toda su vida el seguimiento de Jesús, el Evangelio y el Concilio Vaticno II, que la llevaron a empujar y adoptar una militancia sindical y política a favor de los trabajadores y trabajadoras de la hostelería que no tenían los derechos laborales mínimos para cubrir las necesidades básicas y poder vivir con dignidad.

El objetivo de Maena al crear la Fundación tiene dos vertientes: social y cultural.

Desde esta Fundación se promovieron proyectos, actividades y acciones que facilitaban políticas generadoras de una redistribución de los bienes para favorecer una igualdad entre la ciudadanía, que condujese hacia una justicia social.

Con todo este legado, Maena nos dejó el 5 de agosto del año 2019, en Palma.